A continuación, el Dr. Pau Tarrús nos habla sobre cuál es el mejor momento para iniciarse con las infiltraciones de neuromoduladores para las arrugas. Ya sea como prevención o como tratamiento de las arrugas ya establecidas.
Debemos tener en cuenta que las arrugas establecidas son mucho más difíciles de tratar. Si actuamos preventivamente en edades más jóvenes, podemos evitar que las las de expresión queden «marcadas». Con el paso del tiempo, las arrugas de expresión van actuando sobre la piel. Si paralizamos de forma parcial la musculatura podremos obtener un doble beneficio. En primer lugar, de forma inmediata veremos la frente está más lisa y las «patas de gallo» perioculares mucho menos visibles. En segundo lugar conseguiremos retrasar o evitar la aparición de las arrugas porque evitamos que la contracción muscular «marque» la piel con surcos indeseados.
Algunos centros o anuncios cuando hacen referencia al tratamiento preventivo con toxina botulínica también lo llaman coloquialmente «Baby».
Conseguiremos un envejecimiento natural pero ahorrándonos las arrugas de expresión a nivel periocular, entrecejo y frontales.
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